Últimamente había pensado que las cosas iban muy bien, nunca me había sentido así de tranquila, las cosas iban tomando su curso y yo simplemente tenía que enfocarme a cumplir las metas propuestas para estas vacaciones.
Aun recuerdo aquella tarde, en compañía de nuestros compañeros celebrábamos el feliz termino del semestre y disfrutábamos la perspectiva de las vacaciones y el hecho de ingresar al último año de la carrera, pareciera que nada podía modificar nuestro mundo, nuestra tranquilidad y nuestra estabilidad.
¡Oh ilusa de mi!, no me imaginaba que aun ignoraba muchas cosas, demasiadas y algunas muy dolorosas…fue poco antes para regresar a clases, cuando me hablaste a casa y me pediste que nos viéramos, que tenías deseos de verme, desde hacía un tiempo atrás te comportabas de una forma diferente, te sentía más cercano a mi, más cariñoso de lo normal…más amoroso y fue cuando el miedo me empezó a invadir, algo sucedería de eso estaba segura.
Y sucedió, me enteré de muchas cosas, la cuales ya sabía pero no, no, las habías modificado, las habías cambiado para no herirme y para no…¿perderme?, ¿cómo perder a quien te ama sobre todas las cosas?, me perderías si me decías una mentira y aun así te atreviste a lastimar nuevamente, la abrir la herida recientemente sanada. ¿Feliz?
Justificas la acción por el futuro, por un evento aun mayor…una ilusión más de tu parte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario