viernes, 7 de octubre de 2011

Otro día como cualquiera. /Inconclusa/

El reloj marca las 5am, no le doy oportunidad de que el despertador suene, simplemente extiendo el brazo y apago la alarma y me quedo tumbada en la cama, viendo como las luces de los pocos autos que circulan por la calle, iluminando por segundos la habitación.

La decoración de la misma es un completo desastre, no hay un orden cuanto elegí los muebles, los colores y las texturas, simplemente desee experimentar con los diversos estilos que me ofrecía la tienda a la que fuimos, él pagaría todo, así que no me pude ver limitada e la hora de escoger.

Desde el tapizado de la pared de color salmón hasta la alfombra color rojo morado, no hay una concordancia con los demás integrantes de mi clan secreto, por que sí, aquí tengo mi clan secreto, entre los muebles hay muchas excentricidades mías, escritos que nunca llegarán a la redacción de la editorial, dibujos que he realizado en algunos de mis viajes, recuerdos de los mismos y fotografías de ella, de ese ser que me dejó cautivada desde el primer momento que la vi: el día que fui por los muebles, ella fue quien me atendió después de que su jefe la asignara a esa venta.

Vestía su uniforme que no engañaba a la vista de tener un bonito cuerpo, de esos cuerpos que solamente podemos ver en la televisión con las artistuchas o en las revistas con las modelos, unos hermosos ojos color esmeralda, un verde claro que destellaban bajo la cortina de cabello castaño claro que eran sus hermosos hilos de cabellos, pero la sonrisa que te regalaba era muy falsa, era como si sonriera solamente porque tenía que hacerlo y no por que de verdad lo sintiera.

No me atreví a hablarle hasta la segunda vez que fui a ‘comprar’ la replica de un cuadro de Van Goght, ella misma me atendió y me recomendó algunos, pero yo solamente tenía ojos para ella, tomarla de la mano y salir de ese lugar para ir a nuestro mundo. Terminé la compra y me fui a instalar en el café de enfrente, las sillas que daban hacia la calle me permitían observar lo que ocurría adentro de la tienda, sus movimientos, sus gestos y sonrisas falsas, yo deseaba ser la causante de un sonrisa sincera por parte tuya.

Y así pasaron las horas hasta que fue el cierre de la tienda, cuando por fin pude abordarte o al menos eso desee, puesto que alguien ya te aguardaba más cerca y pude ver que le sonreías radiantemente, con una felicidad mal disimulada, cual sería mi sorpresa cuando lo besaste en los labios y al se pararse se trataba de él, de la misma persona que me había hasta la noche anterior dormido a mi lado, disfrutado de mi a su antojo…también disfrutaba de ti.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...
Algunas de las imágenes no me pertenecen, las tomé de internet, así que si eres dueño de alguna (s) de ella (s) y deseas que te indique cual (es) son tuya (s) o bien, deseas que la (s) quite, no dudes en mandarme un correo indicándolo: kerberus_0423@yahoo.com.mx